Con el control del nombramiento del subsecretario de Administración Tributaria en Nuevo León, de la Fiscalía General del estado y la reciente aprobación para quietarle a Movimiento Ciudadano la Comisión de Presupuesto en el Congreso Local, los legisladores tienen prácticamente desarmado al gobierno de Samuel García.
En su semana de viaje a Egipto, donde Samuel García esta de oyente en la Cumbre del COP 27, los legisladores del Congreso del Estado se han servido con la cuchara grande, realizando cambios importantes en órganos clave para el ejecutivo estatal.
Fue el lunes cuando, por mayoría de votos, el Congreso del estado aprobó reformas a la Ley de Hacienda del Estado para quitarle al Gobernador Samuel Garcia el control para nombrar al titular del SAT estatal, ya que ahora la propuesta del ejecutivo tendrá que ser ratificada por el legislativo.
Posteriormente, y por si fuera poco, el martes, el mismo Congreso del estado aprobó la terna de cuatro aspirantes a la Fiscalía General de Nuevo León, colocando en primer lugar al ex candidato del PRI y contendiente de Samuel García para la gubernatura, Adrián de la Garza Santos.
Aunque Samuel García manifestó que vetaría la propuesta de que sea Adrián de la Garza el nuevo Fiscal, esto tendrá que hacerlo en los próximos 5 días, lo cual, parece imposible si continúa de viaje por Egipto.
Aunado a esto, este miércoles, los legisladores locales, acordaron en la Comisión de Coordinación y Régimen Interno (Cocri) quiérale la presidencia de la Comisión de Presupuesto a la diputada de Movimiento Ciudadano, Norma Benítez.
El argumento presentado por los diputados de las distintas bancadas fue que no puede estar al frente de esta comisión alguien se tenga relación o sea empleada del Ejecutivo Estatal.
Para presidir esta comisión de presupuesto, el coordinador de la la COCRI y de la bancada local del PAN, Carlos de la Fuente, propuso al diputado local de Morena, Waldo Fernández.
Con estos cambios, los legisladores dejan al Gobierno del estado con poco margen de maniobra y limitantes para lleva a cabo los proyectos del Nuevo Nuevo León, que tanto ha presumido.
La inexperiencia y falta de operadores políticos, tiene contra las cuerdas al Gobernador Samuel García, quien ahora tendrá que sentarse con los diputados locales para negociar y gestionar el presupuesto de egresos 2023, donde los diputados también tienen varias sorpresas y ajustes en distintas dependencias.
Con esto, queda claro que el cariño y la relación que llevó a ambos poderes a aprobar la Nueva Constitución, ya no queda nada, por el contrario, el rencor por las promesas incumplidas ya se agudizó en el Congreso del Estado.
